Contigo conocí la dulce sensación
de ser madre por primera vez,
no es fácil definir esa emoción
que recorrió mis entrañas de mujer.
Primogénita luz, mi estrella vespertina
hermosa flor que junio me obsequió,
mi promesa angelical Jenny Martina
sinónimo de fe de esperanza y amor.
Mensajera luz sonrosada de aurora,
anuncia que comienza un nuevo día,
bebiéndose el rocío de la mañana
en cada amanecer con su policromía.
La naturaleza mágica y perfecta
hizo realidad mi sueño ansiado,
canalizó mi vida hasta esa meta
para obsequiarme el fruto deseado.
Al presentirte ya celaba mi vientre
sin conocerte, a ti yo me entregué
mientras viva daré gracias a Dios
por abrirme las puertas del Edén.
Eres perla en una hermosa flor
cuando miro tu frágil y sutil figura,
cultivada en mi cuerpo y corazón
como la joya original más pura.
Dios me confío la sagrada misión
de ser madre como ángel guardián,
siendo ése el más sublime honor
que la mujer siempre quiere alcanzar.
Por ti mi mundo comenzó de nuevo
porque eres la esencia de mi vida,
verte feliz es lo que más quiero
por siempre así será niña querida.
Cuando empieces a soñar, yo quiero
ser intérprete de todos tus sueños,
y mis ruegos lleguen hasta el cielo
con mensajes de todos tus anhelos.
Que siempre seas libre como espiga
que se levanta sobre el cañaveral,
como la garza con plumaje blanco
como enérgica ola elevada en el mar.
Si mis brazos se volvieran alas
para poder subir en raudo vuelo,
vencería el tiempo y la distancia
que nos separa del infinito cielo,
para llenar mis alas de luceros
y alcanzar la estrella mañanera,
con gran amor tejer una diadema
para adornar tu linda cabellera.
Pediré al Señor que me inspire
para ser madre y tu mejor amiga,
aunque el tiempo pase y me limite
aún sin voz diré ” Dios te bendiga”
Para mí siempre serás niña querida
esa parte integral de mi existencia,
teniéndote a mi lado se mitiga
la ansiedad impuesta por la ausencia.
Este inmenso amor es para siempre
con todas las virtudes y defectos,
pero es invencible y muy valiente
no es igual a otros sentimientos.
Te amo y te amaré, hoy mañana
y siempre y más allá.
Te bendice y te bendecirá el corazón de mamá
Lucila Láres Fariñas
de Gutiérrez
Maturín Estado Monagas, 28 de Junio 1966.-
Sencillamente.... ESPECTACULAR!
ResponderEliminarEs uno de los poemas más hermosos que le he leído.
ResponderEliminarMadre de mi alma, te amo con todo mi corazón.
Yenny, te amo y te adoro hermanita...
ResponderEliminarYenny que bello.. y mas lindo aun lo que le dices...
ResponderEliminarEl amor de una Madre es perfecto y sublime..
me entristece no haber compartido este blog antes y poder leer tantos poemas bellos que escribió en vida.. porque desde mas allá lo sigue haciendo en el corazón de sus hijos marcandole el camino a seguir! Interesante que todos compartan el amor a la música, a la poesía.. a las cosas mas tiernas de la vida. Muchos abrazos!!